domingo, 27 de enero de 2008

¡Parker! ¿Dónde están esas fotos?

Pues de momento fotos no, porque el dinero no me llegaba hoy para añadir a la compra una de las tarjetas CF compatibles con el modelo de la cámara. Pero lo importante es que si he logrado finalmente comprarme el cacharro, no se me resistirá una dichosa tarjeta de memoria.

Hoy domingo hemos ido a comer todos juntos con la familia de Dani a uno de los restaurantes "Prada a Tope" que hay en el centro de Madrid. No me voy a entretener en lo que allí comimos porque nunca he sido delicado para ese asunto y yo todo lo suelo encontrar muy bueno. No obstante, se notaba que estábamos en un restaurante especial donde probamos unos productos que saben "a casa".

Después de comer, ya con el estómago lleno y puesto que estábamos cerca del Fnac, decidimos entrar para darnos una vuelta que acabaría con la Canon EOS 400D entre mis manos. Por fin la tenía tras mis dos meses de trabajo en el gabinete de prensa del Colegio de Físicos. Dani se pilló un par de discos y un juego para la DS. Estábamos felices saliendo de allí, como un niño con un juguete nuevo; no, la verdad es que no andábamos muy lejos de aquello.

El caso es que llego al piso y al no tener la tarjeta pues tan solo puedo experimentar un poco con la cámara, pero poco más. A ver si esta semana me acerco y me agencio algo que finalmente me permita empezar a registrar todos los recuerdos de mi vida.

Y sí, señor Jameson, en estos días le traigo las fotos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

con el próximo sueldo te compras la tarjeta, ánimo. Un beso muy fuerte, Mayte (madre de Dani)

Anónimo dijo...

Excelente cámara profesional. Lo de la tarjeta, poco a poco, aunque las tienes a buen precio y con bastante capacidad (8 GB, 10 GB). Si te vas a dedicar a la fotografía, complementa con un buen flash de empuñadura (Metz) y con buen número guía. El flash de estas cámaras se queda corto. Enhorabuena. Antonio R (compañero madre de Dani)