Los insuperables Mortadelo y Filemón

Exactamente. La mejor representación, más allá de las páginas del cómic, fueron los cortos de animación producidos por los estudios Vara entre los años 1967 y 1971. Y fueron los mejores sin necesidad de imaginarlos en carne y hueso, a pesar de la gran adaptación que se hizo en el año 2003 y la de 2008 que aún no he visto.

Saco a colación esto hoy porque hace ya un par de semanas que finalizó la colección gratuita que el diario Público ofrecía a sus lectores, con la entrega de los 23 episodios de estos grandiosos detectives y que nunca fueron ni serán superados. Tiempo suficiente para escribir este post alejado del fanatismo propio del visionado reciente de algún episodio. Pero es que con estos cortos es completamente imposible. Por mucho tiempo que pase, siguen siendo si cabe, más grandiosos conforme pasan los años.

Mortadelo y Filemón han cumplido ya 50 años en las viñetas; y a pesar de eso, se recuerda a esta serie de cortos como los mejores jamás realizados. Las razones son diversas, pero sin duda destacan por encima de todo el excelente trabajo de doblaje que fue capaz de dotar de una personalidad única a este par de dos.

Para el recuerdo quedan frases tan grandiosas que mis amigos y yo solemos recordarlas con bastante frecuencia. Estamos orgullosos de conocerlas; tuvimos ese privilegio, que con la reedición en dvd podrá extenderse a aquellos que no pudieron tenerlas por los motivos que fuera.

Me resulta imposible elegir una de ellas entre tantas. En otro post hablaré de las frases más grandiosas de esta serie de cortos. Cada una de ellas es especial y tiene algo que con tan sólo recitarla... identificas al momento quién, en qué capítulo y en qué momento se dice.

Y es que a mí no se me caen los anillos cuando digo que, incluso hoy en día, todavía me sigo riendo cuando veo o leo las aventuras de Mortadelo y Filemón.