miércoles, 23 de abril de 2008

Se enciende la mesa de luz

Desde hace unos días quería hablaros de un blog que he descubierto recientemente. Su autor es José Pujol y es el editor gráfico del diario Público. El nombre de esta nueva bitácora responde al de Mesa de Luz.

El nombre viene en referencia a ese mueble de carácter técnico formado por una mesa con el tablero de cristal transparente o translúcido y que está provisto en su longitud de tres tubos fluorescentes. El objetivo es observar todos los matices de las fotografías que se dispongan encima de la mesa con total claridad.

¿Qué puede aportar un editor gráfico al mundo de los blogs? Pues mucho, desde luego. Su función en el periódico es la de saber asignar a cada información la imagen que cumpla mejor los parámetros del fotoperiodismo. Todos los días salen publicadas innumerables fotos. Precisamente el objetivo del José Pujol es la de compartir con los lectores ese material gráfico que llega a la redacción pero que por determinadas razones deciden no pasarlas a la maqueta.

La imagen que encabeza el post es una de ellas. Me parece francamente increíble si la persona que la envió perseguía realmente ese efecto, aunque personalmente creo que no, dada la posición de la bola respecto a todo el encuadre fotográfico. Seguramente el fotógrafo pretendía sacar al tenista pero justo en el momento se le cruzó la pelota y la cámara enfocó ese inesperado objeto.

Como decía José, refiriéndose a esta foto, es horrorosa informativamente hablando pero podría ser una muy buena fotografía a todo color en una portada que nos anticipara un reportaje sobre, por ejemplo, la marca de esas bolas (Wilson).

Si os apetece, entrad en su blog. Es una auténtica maravilla que seguramente os hará ver con una mirada un poco más crítica el proceso de selección de fotografías en prensa y disfrutad de aquellas otras que no son escogidas para el periódico, pero que la Mesa de Luz tiene el buen detalle de mostrarlas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Le he echado un vistazo y para interesante. Muchas gracias. Amaya.